Maratón de Santa Cruz

Con la maratón de montaña de Santa Cruz de la Seros podremos conocer la práctica totalidad de senderos, enlazando varios de los demás recorridos propuestos y así acceder a las cumbres más altas de la zona (Cuculo, San Salvador, Balsera), a veces por crestas y caminos poco transitados, por lo que será imprescindible saber orientarse y caminar por fuera de sendero.

Desde el panel de información de senderos, bajaremos por la calle de entrada al pueblo y tomaremos la carretera en dirección a Jaca para salir del casco urbano transitando por ella con precaución durante 100 metros hasta llegar a la Fuente de Binacua.

A mano izquierda, tomaremos el Camino de Santiago durante 3,2 kilómetros dejándonos guiar por sus flechas amarillas, primero por pista de grava y después por sendero. Coronaremos un pequeño collado, donde podremos observar a nuestra izquierda la silueta del Monte Cuculo.

Toca ahora descender hasta encontrar el final de una pista donde a mano izquierda cogeremos otra pista que nos lleva a la caseta de la toma del agua de Binacua; pocos metros después, el camino sale del barranco a la derecha para empezar el fuerte ascenso hasta llegar al final de una pista.

En este punto tomaremos dicha pista sin apenas desnivel durante 1 kilómetro para buscar a la derecha el bonito sendero que por el monte Sarrasos nos llevara hacia Binacua. Descenderemos un buen rato por él y después de cruzar el barranco, remontar brevemente a una pista.

Continuar por ella a la izquierda durante 650 metros, adentrarnos en el casco urbano de Binacua y después de aprovisionarnos de agua en su fuente, pasaremos por debajo de un arco para salir del pueblo por la carretera y buscar una pista a la izquierda junto a un mirador con unos bancos, por la que descenderemos durante 500 metros hasta pasar junto al cauce del barranco. Cruzarlo a la izquierda y emprender el largo ascenso primero por robledal y después por bosque de pinos hasta llegar a una pista. Atravesarla y seguir recto por el precioso sendero en el bosque hasta llegar a la pista que desde Santa Cilia conduce a la ermita de la Virgen de la Peña.

Desnivel positivo

2713 M

Desnivel negativo

2713 M

Altura Máxima

1549 M

Distancia

42,9 KM

Transitar por ella a la izquierda en continuo ascenso durante 1500 metros hasta un cruce de pistas, donde tomaremos la de la derecha otros 300 metros más para coger un sendero que remonta a la izquierda y corona junto a un merendero; aquí seguiremos nuestros pasos a la derecha, en suave y agradable ascenso en dirección a la ermita para después de 1 kilómetro aproximadamente, cuando la divisemos, abandonar el sendero a mano izquierda.

En este punto comienza la difusa senda que en dura subida por la pedrera y con la ermita a nuestras espaldas, nos llevara a salir a la Ralla Quilero. Una vez en la cresta, remontarla con precaución unos metros a su derecha hasta la cima de Cuculo.

Una vez en la cumbre deberemos continuar recto, buscando los hitos de piedra que nos ayudaran a encontrar la senda entre los erizones, descendiendo un buen rato por la misma divisoria de aguas. Obviaremos el desvío a la izquierda que nos bajaría a Binacua en la zona llamada Planies continuando nuestro descenso; al cabo de 350 metros y a la derecha nos introducimos en el bosque de carrascas para continuar la larga bajada hasta salir a un cruce de caminos junto a una caseta de pastores en ruinas.

A continuación, giramos a la derecha por el camino del Carrascal Bajo durante 800 metros hasta salir a la carretera de acceso a San Juan de la Peña; transitar por ella a la derecha y adentrarnos en la Zona Recreativa del Cubilar Nuevo- o de Bartolo-, donde podremos aprovisionarnos de agua en su fuente. Junto a ella, comienza la Senda de las Faxuelas, primero en franca subida, para poco después de coronar y dar vista a los Pirineos, recorrer la base de los acantilados durante 1 kilómetro aproximadamente y llegar a un cruce.

Girar a la derecha para afrontar la dura senda de las tuertas. Afrontaremos esta ascensión con precaución, dejándonos guiar por los hitos, hasta encontrar el camino, ahora más evidente, que nos lleva ya por bosque hasta la carretera.

Cruzarla con precaución y justo enfrente encontramos otro camino que sigue remontando hasta un paso entre rocas con un excelente mirador de Santa Cruz de la Seros, donde giramos a la derecha y por sendero en suave ascenso entre los erizones nos llevara hasta una pista que seguiremos a la derecha hasta el final donde hay una caseta de captación de agua; aquí comienza el camino de las fuentes, pasando por varios abrevaderos y obviando todos los desvíos a la izquierda hasta salir a una pista en una curva cerrada al cabo de 3 kilómetros desde la caseta.

Tomaremos brevemente dicha pista a la derecha para unos metros antes de llegar al Collado Betito, girar bruscamente a la izquierda y afrontar un repecho duro, que en dirección Sur y por cortafuegos nos llevara durante 600 metros hasta salir a la pista de acceso a San Salvador; seguir subiendo por ella para llegar en pocos metros a la ermita de San Salvador.

Nuestro recorrido ahora nos llevara hasta la punta de la Atalaya, último punto accesible del cresterío, el cual recorreremos con precaución, pasando por una primera punta para llegar poco después a la Atalaya y regresar a la ermita por el mismo camino.

Es hora de emprender el largo descenso por la cresta siempre en dirección Este. La recorreremos durante varios kilómetros sin perdida alguna con esplendidas vistas a ambos lados; tras dejar atrás unas antenas repetidoras de telefonía el descenso se hace un poco más pronunciado hasta salir a una pista asfaltada; continuamos descendiendo por ella durante 150 metros para buscar de nuevo a la derecha el sendero que por la cresta nos llevara hacia las ruinas de la Ermita de Santa Teresa donde seguiremos recto 500 metros más hasta llegar a un collado bajo una línea de alta tensión y girar a la derecha en fuerte descenso en dirección a Botaya y al cabo de 350 metros a mano izquierda, tomar otro sendero por el que volveremos a remontar hasta salir junto a la carretera de Bernues, donde poco antes de llegar a ella, tomaremos el sendero a la derecha durante 500 metros hasta un punto donde se cruza la cabañera con la carretera.

Cruzar el asfalto y justo enfrente ascender por la cabañera unos 250 metros hasta un prado y continuar a la derecha por la pista cortafuegos que remonta el Monte Balsera. Una vez coronemos, debemos buscar a la derecha el sendero que desciende por bosque de pinos y carrascas hasta salir de nuevo a la carretera de Bernues.

Sin cruzarla, bordearla junto a una curva para buscar el sendero que durante 400 metros nos llevara en suave descenso hasta salir a la carretera. Transitar por ella 100 metros para abandonarla definitivamente a la izquierda.

Nuestro recorrido ahora ya por sendero, afronta un pequeño repecho hasta un collado, donde comienza el largo descenso en dirección contraria al Camino de Santiago que viene desde Atares. La primera parte la haremos por precioso bosque y después de unas cuantas lazadas saldremos a terreno más abierto. Cruzaremos un par de veces el cauce del barranco hasta salir a una pista y tomarla a la derecha. Continuar bajando por ella y tras volver a cruzar el barranco saldremos a otra pista más ancha, donde seguiremos descendiendo a la izquierda otros 250 metros hasta un puente sobre el cauce.

Justo al pasar el puente, giraremos a la izquierda y tomaremos la senda que en suave ascenso y atravesando el cauce del barranco nos llevara hasta el final de la pista de Riorcal. Una vez allí, descender por ella durante 1 kilómetro hasta llegar al collado de Santa Marina. En el mismo collado, nuestro recorrido sigue a mano izquierda por un sendero hasta llegar a un punto donde nos adentraremos en el bosque y nos guiaremos por los hitos hasta un cruce de caminos.

Seguiremos de frente (obviando el desvío a la izquierda que nos retornaría al Monte Balsera) y tomaremos la bonita y estrecha senda del Paco de San Juan, con pequeñas subidas y bajadas, sin perdida alguna hasta salir a la Cabañera, donde continuaremos a la derecha ya por camino más ancho y después de 350 metros llegar al cruce con el Camino de Santiago que desciende desde el Monasterio Viejo.

Una vez aquí, solo tendremos que dejarnos guiar por las flechas amarillas, obviando un primer desvío a la derecha; seguir nuestro descenso ya por monte bajo hasta entrar en el casco urbano a la altura de unas tablas de ejercicio y retornar a nuestro punto de partida por calle empedrada.